Continuando con el post anterior, seguimos con algunas sugerencias para abordar estratégicamente los diferentes momentos profesionales.
Vas a seguir estudiando y por ahora no quieres trabajar. Piensa en tus motivos para seguir estudiando.
Elige los estudios que más polivalencia te aporten y se ajusten más a las posibles profesiones que te interesan. No estudies por estudiar, no estudies para evitar enfrentarte al mercado laboral o porque “todo el mundo lo hace”. También es interesante aprender idiomas, informática, etc. siempre que creas que serán de utilidad para tu futuro profesional. También podes contemplar la posibilidad de estudiar y trabajar al mismo tiempo.
Estudias y además trabajas. Elegiste un buen camino.
Si estás trabajando sólo por el dinero piensa que las ventajas serán mayores si además accedes a puestos relacionados con tu futuro profesional. O al revés, pensá si tus actuales estudios pueden ayudarte a conseguir una promoción en la empresa en la que trabajas.
No sabes que quieres o en que puedes trabajar. Primero decidí cuál será tu objetivo. Dedicamos 1/3 de nuestra vida al trabajo (a menos que seamos ricos aunque “algunos de estos ricos” curiosamente trabajan aún más) y por esto es importante llegar a trabajar en aquello que queremos. Decide en qué profesión querés trabajar. Hacé una lista de posibles profesiones que te gusten. Tenés que conocer estas ocupaciones, saber los tip
os de tareas y habilidades que se incluyen en cada ocupación o sector profesional. Buscá un centro de información o de orientación donde puedan ayudarte. Recordá que aunque te veas obligado a trabajar “en cualquier cosa” tienes que seguir intentando también llegar a trabajar en lo que te gusta. Y esto incluye iniciar tu propio emprendimiento.
Empezaste tu emprendimiento o pensas hacerlo. Pensá y estudiá la posibilidad de éxito de esta idea y los posibles productos y servicios.
No te apresures. Podés estudiar y trabajar mientras planificas tu start up. Además, tenes que saber si tenés un carácter emprendedor, si sos capaz de soportar las dificultades, si tenés capacidad de trabajo y de coordinar a otras personas. Tené en cuenta que el perfil emprendedor como todo conjunto de habilidades se desarrollan. En general las empresas exitosas son resultado de haber cometido muchos errores a pequeña escala de los cuales se ha aprendido.
Esta lista es enunciativa y las situaciones personales suelen ser más bien un mix atravesadas por otras variables.
Qué otras situaciones se te ocurren? ¿Qué otras ideas podes aportar?
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